Semanario Horizontes

Cachito COMENTA

Por Josè Manuel Gonzàlez

RECORDANDO LATRAGEDIA DEPORTIVA QUE ENLUTO AL PUEBLO DE SAYULA

¿Quién lo recuerda? Probablemente nadie porque en las últimas cuatro décadas(40 años)por no decir cincuenta años se han olvidado del accidente que sufrió el Leónidas en una visita que hacía a Tuxpan, Jalisco. Fue un domingo 17 de noviembre de 1957 cuando llenos de entusiasmo los pata benditas como nos nombraban el resto de los equipo de aquella época Juventud, Dinamo, Rastro con el objeto de molestar porque pertenecimos a la conferencia de nuestras señora del refugio , el día era soleado y tomamos rumbo ,la salida como siempre era de la casa del padre Juanito donde estaba la conferencia y sucedió que frente a la escuela Jacinto Cortina el eterno señor delegado José Antonio Mojica observó que faltaba el botiquín y nos regresamos por él emprendiendo de nuevo el camino, cuando a distancia escuchamos chiflidos de arrieros que venían a dos cuadras de distancias de 5 de mayo y Ramón Corona proviniendo de dos chamacos máximo quince años que ya iban de regreso a sus hogares porque los habíamos dejado al no llegar a tiempo con todo respeto los nombraré por su apodo para los que aùn vivimos los recordemos como cariñosamente los llamábamos el Fito y la Pichona ya rumbo a nuestro destino Teófilo Pérez recordó que a su primo Pichirilo chico su mama de inicio no lo deja ir, llego insistió y consiguió el permiso, iniciamos el viaje todo normal cantando, contando cuentos y una que otra avería cuando llegamos a donde la carretera hace una y griega y se aparta la carretera de Tuxpan y Tamazula se escuchó un estruendo de madera fierros, consecuencia de que nos habíamos volteado y en segundos todo era llanto y dolor heridos por todas partes y tres muertos instantáneos y se trataba de los chamacos que estuvieron a punto de no hacer el viaje y en su momento bien lo dijo el padre Juanito en su homilía Dios los llamó porque los necesitaba.

La angustia y consternación que se vivió esa tarde en Sayula no tiene comparación eran ríos de gente que se aglomeraban a la llegada de las dos únicas líneas de camiones que tenían su terminal en Sayula los llamábamos los amarillos y los verdes todo mundo esperaba tener noticias de sus familiares y mas angustiados se ponían al no encontrar respuesta ya que los que salieron con golpes leves atendían en el lugar del accidente a sus compañero y además los que ameritaban hospitalización fueros trasladados a Tuxpan, Tamazula, cd. Guzman, Tecalitlan sin saber de quién se traban la desesperación de padres de familia, parientes, amigos duró desde las 4 de la tarde que se supo la noticia hasta altas horas de la noche en que ya no había servicio de autobuses.

Las personas con recursos se trasladaron al lugar del accidente en carros particulares, en camiones, en taxis y estos no encontraban una respuesta alentadora cuando no encontraban a su familiar y como sucede siempre se distorsionaba la información ya que aparte de los tres difuntos a los más graves lo apartaban como probables muertos, pero ni nombre ni destino se podían asegurara y fue hasta el día siguiente que ya se pudo confirmar la gravedad de los heridos y lugar donde se encortaban hospitalizados , los cuerpos de los que pasaron a mejor vida después de cumplir con los requisitos de ley la autopsia fueron trasladados a Sayula para ser velados y realmente es incalculable la cantidad de gente que se solidarizó con sus familiares directos e inclusive lo hicieron los demás equipos de Sayula, sus padres sufrían lo inevitable de esta desgracia ya que los vieron partir llenos de entusiasmo y vigor propios de su edad y que ya no regresaron con vida…….. Continuara.

Por hoy se me ha terminado el espacio les deseo un feliz futbolero fin de semana y recuerda que en este mundo nada es verdad ni tampoco mentira todo es del color del cristal con que se mira, nos veremos por ahí en cualquier parte.