Lo difícil no es poner la propaganda, sino, quitarla
Como siempre sucede nadie se ocupa de limpiar de propaganda los postes muy a pesar de que se trate del mismísimo centro histórico. Este de la foto se encuentra a diez metros de la entrada a la pesidencia municipal, que de acuerdo a reglamento, no debió permitirse su instalación.
No hay comentarios:
Publicar un comentario