Por Arturo Fernández Ramírez
Como si se tratara de una gran acción, el gobierno federal anunció la homologación del salario mínimo a nivel nacional, es decir, ya no existirá la división tradicional de las zonas económicas.
En un principio, cuando se legisló sobre el salario mínimo, el territorio nacional se dividió en tres áreas geográficas, las cuales se identificaron en A, B y C, obedeciendo a la ubicación, según fueran zonas fronterizas, de playas, ciudades o resto de la República.
La división de las áreas geográficas y por ende, de los salarios mínimos giraba en torno al costo de la vida en las diferentes áreas geográficas, de tal manera que donde se consideraba más alto el costo de la vida, ahí se aplicaba un salario mínimo mayor.
Sin embargo, siendo realistas, así como definitivamente no cumple su finalidad el salario mínimo de satisfacer las necesidades básicas de un jefe de familia, tampoco cumplían su objetivo los diferentes salarios mínimos.
En efecto, era irrisoria la diferencia que existía entre los 3 tipos de salarios mínimos generales que durante décadas se mantuvo, ya que era uno o dos pesos, lo cual resultaba irrelevante.
Posteriormente, se eliminó un tipo de salario mínimo, quedando dos, de tal manera que el territorio se dividió en igual número de zonas.
Y ahora, por fin, se tomó la decisión de que rigiera un solo salario mínimo general para toda la república.
Entonces, contestando a la pregunta que nos hacemos en el título del Tema de Interés de esta edición, podemos afirmar sin temor a equivocarnos que a nadie beneficia esa homologación salarial en virtud de que aun cuando los que ganaban el salario inferior del salario mínimo ahora ganarán más, esta diferencia es de aproximadamente dos pesos.
Por eso, mientras no se haga respetar la esencia del salario mínimo, la homologación del mismo de nada práctico resultará a la clase trabajadora.
Si acaso las multas incrementarán, ya que parece que el salario mínimo ha sido de mayor utilidad en la fijación de las multas y sanciones pecuniarias al tomar como base precisamente el monto de los salarios mínimos.
Ojala que así como hoy la Comisión Nacional de los Salarios Mínimos tomó la decisión de homologar el salario mínimo, así mismo tome la decisión de elevar este salario de tal manera que en realidad sea suficiente para que todo jefe de familia pueda satisfacer las necesidades en el orden material, de educación, cultura y recreación. ¿Llegará ese día? Lo dudo pero esperemos que sí. Comentarios y sugerencias al correo electrónico arturferam@hotmail.com
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