jueves, 11 de febrero de 2010



Lucrativo negocio la venta de lugares para ver las Comparsas

Por: Rodrigo Sánchez Sosa
Todos los años, lugares estratégicos y se supone cómodos y seguros se rentan al publico para poder presenciar el desfile de comparsas. Los precios se procura sean accesibles. En años pasados la venta de estos lugares a resultado polémica pues se ha acusado a la autoridad de beneficiar intereses privados. Este año y a unos días, al momento de redactar la presente nota, se nos informa que el precio por un lugar en la gradería ronda los treinta pesos, precio a todas luces elevado para la economía popular. Dado que si una familia de cuatro integrantes, el promedio de las familias jóvenes en el municipio, quiere tener acceso a este servicio que ofrece el ayuntamiento deberá desembolsar un día de trabajo del jefe de la familia, que es el salario promedio en el municipio, más lo que se pueda gastar antes y después del evento, que decir si decide ir la núcleo de la feria. Una familia promedio tendría que salir de su casa el día de las comparsas con el dinero equivalente a, por lo menos, una semana de trabajo, de acuerdo al criterio antes establecido. De ahí que se perciba pues como un privilegio este tipo de actos populares. Lo trágico es para la economía local que reciente el encarecimiento de las fiestas con pretextos altruistas, que terminan, se ha podido constatar otros años, en bolsillos de particulares. La supuesta derrama económica que representan las fiestas, no es tan clara para todos los sectores en el comercio. Recordemos que en el último trienio del actual primer edil, los números en ramos y carnaval no fueron tan claros como quisiéramos recordarle. La situación está lejos de ser holgada para la economía familiar en el municipio, algo en lo que la conciencia altruista de comité que organiza el carnaval no reparó, según parece y la información no es falsa.

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