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Por Arturo Fernández Ramírez
A pesar de que no fue nada fácil llevar a cabo la firma de la coalición de las izquierdas en el estado de Jalisco, a escasas tres semanas quedó disuelta en forma definitiva.
La fecha límite para registrar candidatos a gobernador de Jalisco vence precisamente este jueves 15 de marzo y mientras el PRD registrará a Fernando Garza, ex presidente municipal de Guadalajara, Enrique Alfaro lo hará por Movimiento Ciudadano, recibiendo el apoyo de facto del PT, quien al parecer no registrará candidato a gobernador.
¿Quién gana y quién pierde con esta ruptura de la coalición?
Creo que no es fácil responder esta pregunta, ya que de acuerdo a analistas políticos, el PRD necesitaba de Alfaro para crecer su votación, pero también Alfaro necesitaba del PRD para crecer su movimiento con miras a ganar la gubernatura.
Por el grupo de Enrique Alfaro se asegura que el PRD al tener que enfrentar el proceso electoral solo, corre el riesgo de perder su registro estatal. En contraste, por el PRD se afirma que al postularse Alfaro sin el apoyo del PRD, difícilmente ganará las elecciones, ya que de los tres partidos que conformaban la coalición, el PRD era el que mayor preferencia electoral tenía.
Desde esta perspectiva, pudiera pensarse en un primer momento que tanto Alfaro como el PRD pierden.
Pero, si se tiene la convicción de que la izquierda es la mejor opción para gobernar a nuestra entidad federativa, con este rompimiento que afecta a la izquierda en general en nuestro estado, se puede considerar que también resulta afectado Jalisco porque una división pone en serio riesgo la posibilidad de un triunfo de un proyecto diferente al que tradicionalmente ha gobernado en nuestra entidad federativa.
Aunado a lo anterior, a nivel nacional también se tienen repercusiones con este rompimiento, ya que al ser Jalisco la cuarta entidad con mayor número de votos en la República, representa un verdadero atractivo electoral para todos los candidatos presidenciales. Por lo que López Obrador de alguna manera puede resentir este rompimiento. Y es que ahora tendrá que saber conciliar a los candidatos del PRD, PT y MC para juntarlos en el mismo escenario.
En fin, pareciera que todos pierden con esta disolución de las izquierdas.
Con todo y lo anterior, debemos reconocer que en estos momentos es difícil visualizar los daños reales de esta división, habrá que esperar el día de las elecciones para en base a los resultados, saber con precisión quién fue el más dañado, si el PRD, Alfaro, López Obrador, Jalisco o todos. ¿Usted qué opina estimado lector? Comentarios y sugerencias al correo electrónico arturferam@hotmail.com
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