viernes, 7 de marzo de 2014

Aquí Usmajac

Por Rodrigo Carrión Grajeda
Lo negativo de las fiestas carnavalescas
    Muy a pesar de que una gran mayoría de ciudadanos conscientes de los efectos negativos que provocan este tipo de festividades del carnaval hoy día, nuestras autoridades municipales en turno sin ningún pudor o responsabilidad de su parte continúan fomentando de manera irresponsable dichos  festejos con costo del dinero de los pobres contribuyentes de todo el municipio que pagamos nuestros impuestos.     Varias fueron las voces en esta ocasión por diferentes medios las que se manifestaron en contra principalmente de que en las dichosas comparsas participaran sujetos extravagantes, afeminados  y con poca ropa poniendo el mal ejemplo principalmente a los menores de edad, quienes sin malicia alguna captan todo y lo miran tan normal que cuando crecen se confunden sobre sus preferencias sexuales y no dudan en seguir los malos ejemplos de este tipo de personas que hasta les aplauden los ademanes que hacen durante el recorrido la mayoría de las veces más exagerados que las propias mujeres que participan.
    La verdad que existe una diferencia abismal de los carnavales de antes donde el confeti, las serpentinas, los cascarones o una rosa servían de herramienta principal para conquistar los jóvenes  a las muchachas que emocionadas daban vueltas y vueltas al jardín principal esperando encontrar a su media naranja.
    Los bailes populares dentro de cine Mario Moreno, el baile de coronación en el club de leones, las corridas de toros con toreros y rejoneadores de renombre como Gastón Santos, o Pablo Hermoso de Mendoza  que llenaban la plaza de toros a mas no poder siendo estas el platillo fuerte del carnaval Sayula y no el nocivo espectáculo de las comparsas que para muchos deschavetados y sin quehacer es el plato fuerte del carnaval hoy día.
Aparte de todo lo anterior, si de negativismo hablamos en varios sentidos, el cochino espectáculo de la basura que durante  varios días duró por todas las graderías metálicas que duraron más puestas sin servicio a lo largo de la avenida, que el tiempo en que se ocuparon durante las comparsas.
     El alcohol principal ingrediente para chicos y grandes, hombres y mujeres corrió por todos lados pero trasformado en agua de riñón solo bastaba dejarse caer detrás de las gradas y cerrar los ojos para que nadie te mirara o miraras y ya. Todo esto pasó a causa de un placer efímero, caro y de mal gusto de una sociedad mal orientada por quienes nos gobiernan desde las altas cúpulas federales quienes saben cómo tener contento a su pueblo para que no respingue de tanto abuso que cometen en su contra.
    Al parecer un millón de pesos el municipio autorizó para su realización, dinero que en otras circunstancias pudiera haberse utilizado en cosas de beneficio social u obra pública que tanta falta hace principalmente en esta delegación de Usmajac, lo digo porque la dichosa obra de pavimento hidráulico que iniciaran el actual ayuntamiento a casi un año se encuentra parada desde hace varias semanas por la calle Juárez en un tramo de poco mas de 700 metros y no tienen para cuando terminar pues según testimonio de los trabajadores encargados de dicha obra no les mandan dinero para el concreto de la calle y por lo tanto el trabajo no se ha terminado dejando a los vecinos con su calle terregosa peor que como la tenían antes. Así están las cosas con su dichoso carnaval, lo peor, el alcohol que corrió a raudales hasta entre niños y niñas.¿Están de acuerdo señores papás?.    

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