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Por Arturo Fernández Ramírez

"Luchar por el vocacionamiento turístico de Sayula"

Tanto propios como extraños reconocen en Sayula su vocación agropecuaria al ser la principal actividad económica de nuestro municipio.

Sin embargo, también tanto propios como extraños reconocen en Sayula potencialidades culturales y turísticas que si son explotadas pueden dar como resultado que nuestro municipio logre una vocación turística y cultural, lo que indudablemente puede representar un detonante económico y de desarrollo.
En efecto, Sayula cuenta con potencialidades culturales y turísticas como su centro histórico, diversos edificios con valor arquitectónico, ser la ciudad natal de grandes personajes como Juan Rulfo, Severo Díaz, entre otros. Tener tradiciones y costumbres que se constituyen en atractivas recreaciones para propios y extraños. Contar con una excelente gastronomía, con mano artesanal calificada, estar ubicado en una buena posición geográfica, contar con excelentes recursos naturales como el agua, el clima y su valle. Y muchos aspectos más que no se han sabido explotar adecuadamente.
Pretender buscar una vocación turística y cultural para Sayula traería un beneficio económico para la población y con ello se lograría un mejor desarrollo para toda nuestra población. Los lugares turísticos tienen derramas económicas permanentes que le permite a sus habitantes obtener ingresos suficientes para salir adelante. 
Y es que no solo se trata de los recursos que en un momento dado llevan los turistas, sino que implica creación de empleos y autoempleos al estimularse el comercio como otra de las principales actividades económicas de la mayoría de los lugares.
¿Qué falta para que Sayula sea reconocida como una verdadera ciudad turística? Aunque pareciera fácil responder esta pregunta, quizá no lo sea y tan no lo es que simplemente nuestras potencialidades turísticas siguen sin ser explotadas y el estancamiento de nuestra comuna desespera a familias enteras que al no encontrar el sustento aquí, mas de un miembro se ve obligado a ausentarse para encontrar trabajo fuera del municipio y hasta del Estado o País. También pudiera pensarse que corresponde a las autoridades luchar y lograr ese vocacionamiento turístico. Y seguramente se tenga razón.
Pero más allá de lo que corresponda a las autoridades de los diversos niveles, creo que todos estamos comprometidos a luchar, cada quien desde nuestras respectivas posiciones, pero todos debemos luchar porque Sayula logre una vocación turística. Al fin y al cabo a todos nos convendría y todos saldríamos beneficiados. Luchemos entonces por esa vocación para Sayula, nuestros hijos nos lo agradecerán. Sugerencias y comentarios al correo electrónico arturferam@hotmail.com