jueves, 19 de septiembre de 2013

Temas de Interés
Por Arturo Fernández Ramírez
Lo vulnerable que somos ante los desastres naturales
Indudablemente los fenómenos de la naturaleza que causan desastres hacen recordar al ser humano lo frágil, vulnerable y débil que en realidad es, ya que con todo el avance tecnológico que muchas veces suele presumirse, nada puede hacerse para evitar sufrir daños cuando la naturaleza nos golpea de una u otra forma.   Aunque también debemos reconocer que muchas veces somos nosotros como seres humanos los que provocamos por negligencia o irresponsabilidad que la naturaleza nos castigue (si es que se le pueda llamar castigo) causando daños.
Por ejemplo en los desastres que se ocasionan por inundaciones, si nos ponemos a analizar las cosas, vamos a encontrar que en realidad no solo es porque llueva mucho o poco, sino porque los cauces naturales de los arroyos o ríos fueron desviados, porque la basura que nosotros generamos obstruye el curso del agua o porque se permitieron asentamientos humanos precisamente en los lugares de alto riesgo.
Entonces, en muchas ocasiones somos nosotros los causantes de que las catástrofes se generen. Por supuesto que todo lo anterior viene a colación a propósito de las recientes lluvias o tormentas que en muchas partes de nuestro País dieron como resultado precisamente bastantes daños materiales y lamentablemente también pérdidas humanas.
Sayula está considerada como una zona de alto riesgo por el paso del Arroyo Agua Zarca, ya que la historia registra desastres causados por el desbordamiento de dicho arroyo. Y este pasado fin de semana no fue la excepción para que las intensas y permanentes lluvias, que por cierto enmarcaron los festejos patrios, hicieran que se desbordara nuevamente el Arroyo Agua Zarca, provocando que se prendiera la alerta roja y se llevaran a cabo acciones de evacuación de familias que corrían riesgo por la cercanía del arroyo.  Afortunadamente no pasó a mayores, salvo daños estructurales que sufrieron algunos inmuebles, entre ellos una institución educativa.     Lamentablemente no en todos los lugares pasó así, ya que en otros municipios y en otros Estados, las aguas sí causaron graves daños.
Ojala que por parte del gobierno estatal y federal se agilicen los apoyos que están presupuestados precisamente para este tipo de siniestros, porque suele suceder que llegan todo tipo de apoyo a los damnificados y hasta el final, pero muy al final, se liberan los recursos económicos gubernamentales.
Esperemos que en esta ocasión no suceda así y que las instancias de gobierno correspondientes brinden el apoyo a los damnificados con la celeridad que el caso lo requiere. Mientras tanto, nosotros debemos trabajar de manera responsable en la prevención para evitar o minimizar en la medida de lo posible los riesgos que los fenómenos naturales pueden ocasionar. Comentarios y sugerencias al correo electrónico arturferam@hotmail.com


No hay comentarios:

Publicar un comentario