Semanario Horizontes

La Mano del Metate

Por Hugo Rodrìguez Vàzquez

Ruidosa moto por las noches

Vecinos de la ciudad se quejan del ruido ensordecedor que provoca una motocicleta tripulada por un joven que sobre todo a altas horas de la noche merodea por casi toda la población, provocando en forma imisericorde, crispación de los nervios pero sobre todo enojo y rabia que mnadie haga algo por poner un alto a este NACO en ruidas que molesta a todo le mundo. La policìa municipal, en obvio de que el personal de trànsito no labora a esas horas, dberìa actuar en forma emergente en un incidente de tipo vial y detener a este individuo payaso y llevarlo ante el juez municipal, se denuncia.
Y ya que hablamos de nacos y payasos...
Qué le parece el no menos ensordecedor ruido que muchos conductores traen en sus vehículos con sus estèreos a todo volúmen, presumiéndonos a todos su música naca, como si quisieran que todos escuchemos su pèsimo gusto musical. Si mucho les gusta su música (corridos de narcos, etc.) que cierren las ventanillas de sus vehículos y que se rompan los oídos ahí dentro ello solos, entendiendo que por otro lado nos parece que llevar la mùsica a todo volúmen está prohibido por la autoridad vial porque puede conducir a un accidente.
Usmajac envuelto en riñas de pandillas
Como ya bien lo señala, el compañero Rodrigo Carrión grajeda, en su columna de esta semana de la página 3 de este semanario, el pandillerismo asola a la comunidad de Usmajac volviéndose ya intolerable las constantes riñas entre las pandillas rivales de la delegación que cada fin de semana sino es que a diario, provocan el escozor y la incertidumbre en todas las familias porque ya nadie puede pasear en una tarde o noche de los domingos sin el temor de ser víctima de un golpe o de una zafarrancho tal y como ocurriò el pasado fin de semana en el centro de esa delegación cuando dos pandillas rivales se enfrentaron en el lugar con saldo de un “navajeado” y muchos màs golpeados y detenidos. Y no crea usted que son adolescentes, muchos de ellos son ya adultos “sorgatones” a los que deberìa dar vergüenza su actitud. Los vecinos y la policía deberían de una vez por todas enfrentar con valentía este problema de inseguridad por el bienestar de todas la familias.